Dry Martini. Una vez oí que el Dry Martini se inventó en el clásico Harry´s Bar de Venecia, el de los Bellinis (una pena no haberlo sabido entonces). No parece ser la versión oficial, pero da igual, lo que es interesante es como dicen prepararlo en este bar: se abre una botella de Gordon´s, se añade un dedal de Martini blanco, se agita y al congelador, luego se sirve tal cual sin aceituna ni nada.
Hay muchas formas de preparar un Dry Martini, hay incluso libros enteros dedicados a ello. Mi fórmula es sencilla: se echa un pequeño chorro de Martini blanco en la coctelera, se agita, se abre y se tira el Martini pero se deja el interior impregnado de éste, se rellena con hielos buenos y ginebra (Tanqueray), se agita de nuevo congelando la ginebra sin aguarla y se sirve; sin aceituna pues no vas a abrir una lata para sólo una y no se suelen tener a granel. Así no manda el fuerte sabor del Martini pero sí queda su amargo toque.
Ciertamente, está bueno, muy bueno, el coctel por excelencia, tras el Molotov que es un poco más fuerte.
Don Curro.
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